Lo complicado de fotografiar la luna, está en evitar que se nos queme la imagen y que por lo tanto sus detalles y cráteres queden intactos en nuestras fotografías. Normalmente en los primeros intentos de fotografiar la luna te habrás llevado una decepción, ya que solo aparecía un punto blanco en el cielo.

Técnicamente, fotografiar la luna es bastante sencillo, simplemente hay que poner en práctica unos pocos consejos y tener un equipo adecuado.

Piensa que la luna aparece cada noche, así que tendrás muchas oportunidades para realizar la fotografía que tienes en mente.

En este post os voy a explicar como fotografía la luna como protagonista, es decir, nuestra fotografía solo aparecerá en primer plano. Es importante conocer las fases lunares para realizar la sesión. Si lo hacemos el mismo día de luna llena, probablemente la imagen se queme al reflejar sobre ella la luz proveniente del sol. Es preferible fotografiarla un día antes o un día despues de estar llena.

¿Qué equipo necesito para fotografiar la luna?

Para fotografía la luna no necesitas un gran equipo, tu cámara y un teleobjetivo serán suficientes para obtener buenos resultados ya que la luna es muy brillante y podrás disparar a una velocidad alta sin utilizar trípode (aunque es muy recomendable), ya que hoy en día las cámaras llevan buenos estabilizadores.

Olvídate del móvil. Por muy buena que sea la lente de tu móvil, es imposible hacer una buena foto. Necesitas una cámara con controles manuales y un sensor de buen tamaño.

• Trípode: Para tener una buena estabilidad. Nos ayudará a mantener la cámara estable y apuntando hacia arriba.
• Control remoto/disparo retardado: Necesitamos que la cámara dispare sin que nosotros tengamos que pulsar el disparador, para ello utiliza un control remoto o simplemente usa el temporizador y ponlo a 2, 10 segundos.
• Objetivo: En este punto, contra más mejor. Piensa que a pesar de ver la luna cerca, está muy lejos. Si disparas con un objetivo gran angular, la luna se va a ver diminuta. Por ello, para sacar una foto de calidad, necesitas como mínimo un 200mm, y si es superior, mucho mejor.

Tomando la foto

• Medición puntual: Ésta es la mejor opción. Piensa que al estar rodeada de la oscuridad del cielo, si eliges otro tipo de medición, intentará sacar detalles en el cielo, aclarando la luna hasta sobreexponerla. Al utilizar la medición puntual, medirás concretamente sobre la fuente de luz que quieres fotografiar, ajustando tu cámara de tal forma que consigas detalles de la superficie lunar.
• Dispara en RAW: Asegúrate de que tu cámara no está en disparando en JPG, el RAW te permitirá corregir fallos de iluminación y conseguir mayor nitidez en la edición, además de elegir la temperatura de color que te guste.
• Bloqueo espejo: Si dispones de una cámara reflex digital, el movimiento que produce la cámara cuando toma la fotografía, puede provocar que aparezcan vibraciones. En mi caso tengo una Olympus sin espejo, y dispone del modo Antigolpes.

Ajustes de la cámara

• ISO: Escoge un ISO bajo, entre 100 o 200, así evitaremos ruido en nuestra fotografía. Si quieres que la luna forme parte de una composición quizás tengas que modificar un poco el valor, pero lo recomendable es usar la sensibilidad ISO más baja.
• Diafragma: Utiliza el «punto dulce» de tu objetivo, que normalmente se encuentra entre f8 o f11, y así tendrás más definición.
• Velocidad de obturación: Ten en cuenta que la luna se mueve, y bastante rápido, por lo que necesitarás una velocidad no muy lenta, entre 1/500, 1/200. Tendrás que ir probando y realizar diferentes pruebas.

Postproducción

Como hemos disparado en RAW, nuestras posibilidades de sacar una imagen excelente aumentarán mucho. Para ello la mejor opción es utilizar Lightroom, ya que te permitirá corregir posibles fallos de iluminación y conseguir mayor definición y nitidez en la edición.

Hay que tener en cuenta que el archivo RAW contiene toda la información en bruto de la imagen que es capaz de captar el sensor de nuestra cámara, por lo que tenemos muchísima información digital con la que trabajar en la edición.

Ajustes básicos:

• Bajar las altas luces.
• Bajar los negros.
• Aumentar un poco la claridad hasta que la luna destaque como nos gusta.

Y el resto ya va a gustos, dependiendo de la fotografía de cada uno, y vuestra edición personal.